Apenas el 25% de personas con trastornos de salud mental tiene acceso a atención específica en países de ingresos medios y bajos, según la OMS. Juan Ciudad ONGD promueve un programa en Senegal para mejorar la atención primaria en dolencias relacionadas.
El próximo 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental y como cada año, Juan Ciudad ONGD quiere dedicar un espacio para hablar de este asunto de enorme impacto en las personas y en las comunidades, con especial atención a las más vulnerables.
Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud mental tiene que ver con nuestro bienestar emocional, psicológico y social y afecta a la forma en la que pensamos, sentimos y actuamos cuando nos enfrentamos a diferentes situaciones que la vida nos depara.
En nuestras sociedades económicamente desarrolladas, la financiación y acceso a servicios de salud mental de calidad ha sido tradicionalmente deficiente, siendo esta situación agravada durante la pandemia, con unos servicios sanitarios saturados y en muchos casos paralizados.
La realidad es más complicada aún para las personas que viven en países empobrecidos. En estos, el impacto de la Covid-19 se suma a sistemas sanitarios con carencias que hacen más difícil si cabe el acceso a un tratamiento de calidad para hacer frente a estas patologías y dolencias relacionadas con la salud mental. Las cifras son elocuentes: “Más del 75% de las personas con trastornos mentales, neurológicos y por consumo de sustancias no reciben ningún tratamiento para su afección”, de acuerdo con el organismo internacional.
Salud mental y Cooperación Internacional. Salud Mental Comunitaria en Senegal
En Juan Ciudad ONGD, nos involucramos en distintos proyectos que cuidan la salud mental en África, América Latina y Asia. Uno de ellos se desarrolla en Senegal, concretamente en las regiones de Thiès, Louga, Fatick y Kaolack i Diourbel, que en conjunto suman una población superior a los 600.000 habitantes.
El centro “Dalal Xel” de Thies es el único centro hospitalario de salud mental en la región de Thies. Alberga actividades y servicios de atención socio – sanitaria para personas con problemas mentales y tiene una trayectoria de más de 20 años en el país. Atiende a un promedio de 18.000 personas anuales en consultas externas, de las cuales, un 45% son diagnosticadas con algún tipo de enfermedad mental. La esquizofrenia, la psicosis aguda y la epilepsia constituyen el 80% de las patologías atendidas.
Este proyecto de salud mental comunitaria complementa las actividades que los Hermanos de San Juan de Dios llevan ejecutando desde el año 2013 en el país. Durante el año 2020, el proyecto ha beneficiado a un total de 1.342 personas en cuatro comunidades rurales, que han recibido la atención y el seguimiento de un equipo de salud mental especializado.
Este proyecto que pretende garantizar el derecho a la salud mental consta de cuatro metas:
1. Facilitar el acceso de la población a los servicios de atención para la salud mental, mediante la reducción de las barreras geográficas, económicas y socioculturales.
2. Fortalecer las redes locales de intervención.
3. Empoderar y capacitar a las personas beneficiarias, pacientes y familiares, en cuidados médicos y personales para fortalecer sus conocimientos en salud pública y comunitaria.
4. Y, por último, mejorar la asistencia médica ambulatoria a través de la capacitación del personal médico y del refuerzo de material y compra de equipos.
Para llevar a cabo este proyecto de gran envergadura colaboran diferentes organizaciones, como el centro Dalal-Xel de Thies, en coordinación con Juan Ciudad ONGD y con el apoyo del Hospital Parc Sanitari San Joan de Deu, el Ayuntamiento de Sant Boi y la Fundación Carasso.